Objetivo no en lista: cumplido.
Me tatúe, si! me hice mi primer tatuaje... fue casi frente al mar, una atardecer muy lindo, y la luna asomando a ver la obra culminada.
La pregunto del millón: ¿¿¿te dolió??? pues para ser sincera si, me dolió en algunas partes mas que en otras... pero es llevadero, además valió la pena :)
La cita fue acordada con un día de anticipación. Ante la llegada de la hora pactada acudimos a la cita, mi tío y yo, llegamos y ooo sorpresa Arturo (el tatuador) no estaba... con pena y una extraña tranquilidad retomamos el camino por el malecón, pensaba: cuando llegue a Lima me tatuaré. Llegamos a la casa de mis abuelos, tratando de ver a donde ir a pasear, ya que era mi ultima tarde; decidí ir a hacer compras con mis tías cuando en eso... Arturo apareció.
En diez minutos estaba ahí parada diciéndole como quería que sea, que colores y en donde debía ir... el se alistaba preparando los insumos para el caso... yo algo nerviosa, impaciente... la dibujo... la mire...y empezó a quedarse en mi piel.
Manchitas rojas comenzaron a aparecer y un ligero dolor se volvía insistente. Una luna con el perfil de una mujer, de cabellera roja me robó el sueño, literalmente.
Mis padres me dejaron y tenían toda la intención de irse sin mí, pero los alcancé y con mi Luna acompañante... una hora después reingresábamos a Lima.
La pregunto del millón: ¿¿¿te dolió??? pues para ser sincera si, me dolió en algunas partes mas que en otras... pero es llevadero, además valió la pena :)
La cita fue acordada con un día de anticipación. Ante la llegada de la hora pactada acudimos a la cita, mi tío y yo, llegamos y ooo sorpresa Arturo (el tatuador) no estaba... con pena y una extraña tranquilidad retomamos el camino por el malecón, pensaba: cuando llegue a Lima me tatuaré. Llegamos a la casa de mis abuelos, tratando de ver a donde ir a pasear, ya que era mi ultima tarde; decidí ir a hacer compras con mis tías cuando en eso... Arturo apareció.
En diez minutos estaba ahí parada diciéndole como quería que sea, que colores y en donde debía ir... el se alistaba preparando los insumos para el caso... yo algo nerviosa, impaciente... la dibujo... la mire...y empezó a quedarse en mi piel.
Manchitas rojas comenzaron a aparecer y un ligero dolor se volvía insistente. Una luna con el perfil de una mujer, de cabellera roja me robó el sueño, literalmente.
Mis padres me dejaron y tenían toda la intención de irse sin mí, pero los alcancé y con mi Luna acompañante... una hora después reingresábamos a Lima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario