...Nuestras miradas se encontraron, tu nariz con la mia se saludaron, te sonrojaste me sonroje, tu cabeza dibujaba mi rostro y tu mirada enamorada me decía: vuelve a atraparme, tú puedes!. Seguíamos silentemente en el juego tan paciente, yo nerviosa logre atraparte- atrape tus labios en el roce mas sutil, y el beso mas discreto nos atrapo y envolvió tan dulcemente en nuestro amor. Nos miramos y sonreimos, y fue entonces el gusto por recordar tiempos no muy antiguos pero si muy bellos y claro mas era el echo de expresar nuestro amor con los labios (mas obvia no pude ser, moria por besarte por decirte cuanto te amo, hasta ahora la emoción me embarga y las frases complicadas se hacen muy largas relatar todo lo que senti).
Esa noche la Luna brillo nuevamente para tí y para mí, es que ella no pudia faltar siendo testigo ocular de todas las historias que nuestros corazones, memorias, pasos, sonrisas y miradas pueden narrar.
Gracias meMORIas por no irte de mi vida, por ser el amor de esta y de todas mis vidas mas dos días más.
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